Ajolotón: un ejemplo más de negligencia y deterioro ecológico

• Liberan ajolotes en aguas contaminadas 

Por Elisa Domínguez Álvarez Icaza y María Isabel García Vázquez

CDMX. El pasado 16 de febrero, se llevó a cabo el “Ajolotón”, evento en el que se liberaron 200 ajolotes negros en un canal de Cuemanco, ubicado en la alcaldía de Xochimilco. José Carlos Acosta Ruíz, alcalde de Xochimilco, Francisco Chíguil, alcalde de Gustavo A. Madero; Armando Quintero Martínez, de Iztacalco; Clara Brugada, alcaldesa de Iztapalapa; Berenice Hernández, de Tláhuac; Judith Vanegas, de Milpa Alta; y Evelyn Parra Álvarez, de Venustiano Carranza, se encargaron de manipular y liberar a los ejemplares.

La medida obtuvo una respuesta negativa en distintos sectores de la sociedad, principalmente en el ámbito científico, biólogos y expertos en conservación advirtieron que los resultados podrían ser perjudiciales para los especímenes, el ecosistema y el sistema chinampero.

Según especialistas del Laboratorio de Restauración Ecológica (LRE) del Instituto de Biología de la UNAM, las posibilidades de supervivencia de los ajolotes son nulas. Debido a que los canales del humedal de Xochimilco son recargados de agua tratada que empeora drásticamente su calidad. Además, las tilapias y carpas introducidas en el lago son una amenaza para su supervivencia, así como el haber sido criados en cautiverio.

En entrevista con El Reforma, Luis Zambrano, investigador del Instituto de Biología de la UNAM y director del proyecto Chinampa-Refugio, aseguró que: “Aventar los ajolotes no es buena idea, por muchas razones, la primera es que no se está restaurando el hábitat”.

El proyecto Chinampa-Refugio es una iniciativa en conjunto con el LRE, instancias gubernamentales y chinamperos, dedicada a crear áreas protegidas aptas para la inserción de los ajolotes y a mejorar las condiciones para la producción chinampera, parte fundamental para la restauración de la zona.

Diana Laura Vázquez, bióloga y miembro del LRE, escribió a través de Twitter (@reecife__): “Esta acción lo único que representa es la ignorancia y desvalorización del trabajo de los chinamperos que durante años han trabajado en la implementación de estos refugios y con quiénes se han construido estudios muy profundos desde el intercambio de saberes y la ciencia”. Y creó el hashtag #AventarNoEsConservar, el cual, se replicó de forma importante, la publicación original obtuvo más de tres mil retweets.

Para la periodista Beatriz Guillén, el evento fue un “espectáculo político” que definió como una masacre de los anfibios. Así lo expuso en su artículo “La masacre del Ajolotón”  publicado en El País.

Los habitantes de Xochimilco en reiteradas ocasiones han expresado su descontento con la gestión gubernamental, siento “El Ajolotón” uno solo de los ejemplos de la negligencia y el deterioro ecológico de la zona.

La contaminación del canal y la introducción de especies sin la adecuada investigación ha implicado el deterioro del ecosistema, la extinción de especies como el ajolote y la afectación de las prácticas agrícolas tradicionales.

Foto: Twitter