A SUS 80 AÑOS, RIUS TIENE MUCHO QUE DECIR

Por Itzel Esmeralda Ramírez Martínez
México (Aunam). ¬Mis confusiones, memorias desmemoriadas es el título del libro más reciente de Eduardo del Río García, quien con el paso de los años se fue convirtiendo en Rius. En este libro se encuentran las memorias del caricaturista mexicano, que cuenta con detalles su vida durante ocho décadas.

La presentación del libro realizada por Rius contó con la presencia de Ariel Rosales y Jesusa Rodríguez, quienes contaron anécdotas sobre él caricaturista. También estuvo el director del Museo de la Ciudad de México y Elena Poniatowska.

“Rius comienza su autobiografía con esta línea: Como que se me hace difícil hablar de mi padre o bien define el humor como algo que nos llega de las ondas etéreas que sepa la chingada por donde quedan”, así es la introducción con la que el editor Ariel Rosales define el libro: Mis confusiones.

Las palabras de Jesusa Rodríguez fueron: “Rius del Río fluye desde hace 80 primaveras, con una piel impermeable a los elogios y nos ha hecho fluir a muchas personas hacia el gran océano de la risa, la salud, el anticlericalismo y mil temas más. Rius es a la cultura mexicana, lo que la risa es a la salud del cuerpo”.

Posteriormente Jesusa hizo entrega de un cuadro de San Ateo a Elena Poniatowska, que en la cara del santo tenía el rostro de Eduardo del Río y este le dio la primera bendición atea, seguida por los aplausos de la audiencia.

Al término de la presentación se procedió a partir el pastel con el que se le cantaron Las mañanitas al escritor, por la conmemoración de su cumpleaños número 80 el pasado 20 de junio. Al concluir esto, Rius tomo lugar para firmar los libros de los asistentes y mostrarles su agradecimiento por estar presentes en el evento.

Fue una presentación llena de recuerdos para los participantes, como los separadores que se les regalaron a la entrada y en la compra de los libros y una lotería fuera de lo común. Un juego ideado por Jesusa Rodríguez para acordarse de las infamias hechas por el PRI y el PAN, y que cada vez que se coloque una marca en el tablero el jugador dirá en voz alta: ¡No se olvida!