Cenart rinde homenaje musical a Rafael Tovar y de Teresa

Por: Frida Sauballet 

México. En el marco de los 30 años del Centro Nacional de las Artes (Cenart), la Orquesta Escuela Carlos Chávez (OECCh), el Coro Sinfónico y el Ensamble Escénico Vocal del Sistema Nacional de Fomento Musical (SNFM) realizaron un concierto en memoria del diplomático, historiador y funcionario Rafael Tovar y de Teresa, pues durante su cargo como presidente de Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) concibió a dicho Centro, el cual ha tenido un papel fundamental en la educación, investigación y difusión artística. 

Durante la presentación estuvieron presentes el director artístico y musical Eduardo García Barrios, Rafael Tovar López Portillo, hijo del funcionario, Antonio Zuñiga Chaparro, director del CENART, Roberto Renteria Yrene, coordinador nacional del SNFM y Eduardo Amerena Lagunes, coordinador ejecutivo del Auditorio Nacional, quienes demostraron su admiración y recordaron entre anécdotas a Rafael Tovar y de Teresa por el gran trabajo que fungió en vida como promotor cultural en cada puesto que desarrolló. 

El historiador Rafael Tovar y de Teresa tuvo un papel clave en el desarrollo cultural del país, lo hizo en primer lugar como secretario de Cultura, después como director general del Instituto Nacional de Bellas Artes y durante su trayectoria definió y gestionó proyectos para la política cultural y modernización de las instituciones, pues tenía la visión de preservar el legado de México, por ello abrió distintos espacios para contribuir al fomento artístico. 

Rafael Tovar López Portillo dedicó algunas palabras e hizo énfasis en lo que significaba para su padre la cultura y expresó lo siguiente:

“Para él la cultura no era sólo un sistema coherente de símbolos y significados para explicar el mundo, sino la esfera de la actividad práctica gracias a la cual se puede influir y modificar la realidad, era lo que fortalecía a la comunidad, el sentido de pertenencia y el orgullo de ser mexicanos. Solía decir que desde la cultura, desde donde se propicia el diálogo, la tolerancia y el respeto, era en ese ámbito donde se puede construir la paz” 

Además, el licenciado Eduardo Amerena Lagunes destacó que para Rafael Tovar la música era uno de sus grandes amores, por lo tanto, en el Auditorio Blas Galindo, las pianistas Farizat Tchibirova y Aytaj Rzaguliyeva, en compañía de la OECCh interpretaron el concierto para dos pianos en re menor, de Francis Poulenc. Conformado por tres movimientos, la obra resulta desafiante ante el diálogo musical que deben mantener  los 2 pianos y la orquesta pues engloba  una carga polifónica.

El público quedó asombrado por las diferentes sensaciones que causaron los movimientos musicales interpretados, pues el primero de ellos está lleno de efusividad y a su vez de un tono burlón; el segundo caracterizado por la nostalgia en algún momento crea una incertidumbre acentuada, pues los diálogos entre las solistas y la orquesta no hallan su destino; finalmente en el tercero sintetizan diferentes estilos pero crean una armonía perfecta. Esta obra fue escrita en 1932 por un encargo de la princesa Edmon de Polignac, una de las mecenas musicales más importantes de la época. 

El Coro Sinfónico, el Ensamble Escénico Vocal del SNFM y la orquesta OECCh bajo la batuta del director Eduardo García, interpretaron la Cantata Sueños del compositor mexicano Arturo Márquez, conformada por cuatro movimientos, que hacen referencia a los sueños de líderes visionarios que lucharon por los derechos humanos, la paz y la justicia social, tales como Martin Luther King, el Jefe Seattle, Mahatma Gandhi y del político brasileño Cristovam Buarque. Para la conformación de la obra, Eduardo Langagne realizó el guión, adaptó poéticamente los textos y creó otros originales. 

Antes de finalizar el concierto, presentaron el quinto movimiento, titulado “Alas de Malala”, una cumbia Sinfónica que a partir de su estreno en 2013 se convirtió en el himno del Movimiento Nacional de Agrupaciones Musicales Comunitarias y cobró gran relevancia pues la comisionó el SNFM con el aval y entusiasmo de Rafael Tovar y de Teresa. La propuesta de crear una canción que hablara sobre educación, las infancias y estuviera inspirada en la lucha de Malala Yousafzai, fue idea de la hija del compositor mexicano. 

El público levantado de sus asientos ovacionó por varios minutos a los músicos que pusieron en alto la memoria del historiador Rafael Tovar y de Teresa a través de un concierto de dos horas que reconoció el legado dejado por él y la trascendencia que ha mantenido el Cenart durante sus 30 años de camino artístico.