20 de agosto de 2022

“Lagunilla, Mi Barrio”: del cine a los escenarios


Por J Adrián Maya 
CDMX. A más de 40 años del estreno cinematográfico de “Lagunilla mi barrio”, protagonizada por Lucha Villa; Ariel Miramontes y Daniel Chávez presentaron una puesta en escena que retrata a una de las colonias más emblemáticas de la capital mexicana.

Es una adaptación teatral con tintes más actuales y una temática al estilo de los actores y personajes que conformarán el elenco seleccionado. “Todo en sí es un homenaje a quienes estuvieron en la película”, mencionó Ariel Miramontes, también conocido por su personaje ‘Albertano’, en entrevista posterior a la presentación de la obra.

Ariel Miramontes ‘Albertano’

Miramontes explicó que se inspiró en la película para escribir el guion de esta obra de teatro. El escenario contará con la presencia de Germán y Freddy Ortega; Violeta Isfel; Maribel Guardia; José Luis Guarneros; Alma Cero; Daniel Bisogno; y el debut en teatro de la cantante Laura León quien interpretará algunas de sus canciones para transformar, en palabras de los directores Miramontes y Chávez, “una obra romántica” en una obra musical con orquesta en vivo. 

Esta obra será dramatizada en el Centro Cultural Teatro 2 de la Ciudad de México, ubicado a unos pasos de la estación de Metrobús Cuauhtémoc en la Alcaldía del mismo nombre. Las funciones serán de viernes a domingo del 2 de septiembre al 30 de octubre, en un horario a partir de las 17:00 horas. 

La invitación de asistencia a esta obra está dirigida a aquellas personas que gustan del humor inspirado en el cine mexicano entre 1980 y 1990, para que el público conviva por un momento con los recuerdos de los personajes que inmortalizaron sus diálogos y movimientos en las pantallas de aquella época. 

Esta nueva adaptación al teatro de “Lagunilla mi barrio” presentará un primer acto que enmarca la situación sentimental entre los personajes de Ariel Miramontes y Alma Cero a quienes se le suman Germán Ortega y José Luis Guarneros en una euforia de baile, gritos, empujones y la aparición de Violeta Isfel para cerrar el cuadro. 

Freddy Ortega presentó de manera oficial a Laura León “la Tesorito” como parte del elenco. Con una lluvia de explosiones y un letrero de luces neón que enmarcaba el escenario, la breve interpretación de “Suavecito” provocó el aplauso de los asistentes quienes inmediatamente desenfundaron sus teléfonos celulares y cámaras para captar uno de los acontecimientos más llamativos del día. 


Un grupo de bailarines salieron al escenario para acompañar a Laura León y enmarcar su salida en medio de gritos del público. El telón se cerró y cuando volvió a abrirse, una mesa larga llena de los actores y bailarines atendió las preguntas de los periodistas.

La colonia Lagunilla y los actores

“Realmente fue mi barrio durante más de 10 años”, aseguró Ariel Miramontes; pero no fue el único; para varios de los actores y actrices que forman parte del elenco, el barrio de la Lagunilla ha sido un lugar al cual han acudido y habitado. 

Violeta Isfel compartió, en entrevista, que este barrio fue uno de los lugares que constantemente visitó durante sus estudios de teatro y danza, pues en él es donde logró encontrar souvenirs y materiales que le ayudaran a la creación de sus vestuarios y sus personajes. “Yo antes tomaba el camión que me dejaba ahí cerquita, a unas calles del mercado; todo ese trayecto hacía yo para poder llegar”.

Violeta Isfel

El espectáculo de luces, música y actores reconocidos en la televisión y el teatro convierten a esta adaptación en una opción para visitar el Centro Cultural Teatro 2 que abre sus puertas a dos historias de amor ambientadas entre la clase popular y el humor. 





 Bookmark and Share

Pumas, el equipo mexicano que concretó un hito en España

Foto: Club Universidad

Por Faustino Alcántara
Pumas logró lo que ningún otro equipo mexicano pudo hacer en España. A pesar de la derrota por marcador de 6-0 frente al Barcelona, el conjunto auriazul se convirtió en el único club en la historia de la Liga MX que disputó los trofeos amistosos de tres de las escuadras más importantes de LaLiga: el Joan Gamper de los culés, el Santiago Bernabéu de los merengues y el Villa de Madrid de los colchoneros.

No todos los clubes americanos tienen la posibilidad de enfrentar al Barcelona, Real Madrid y Atlético de Madrid, aunque sea en juegos de exhibición. Los felinos pueden decir que tuvieron esa dicha: aprovecharon la oportunidad para medirse frente a algunos de los colosos europeos en su presentación oficial frente a su hinchada. Sus pasajes en el Viejo Continente iniciaron en los años ochenta. 

Atlético de Madrid recibió a los universitarios en 1982. Los invitó a un formato de cuadrangular en el que también participaron el equipo alemán Borussia Dortmund y el brasileño Atlético Mineiro. Un marcador de 3-2, favorable para los anfitriones, provocó que los mexicanos cayeran en Semifinales. Un posterior 1-0 le otorgó a Pumas el tercer lugar de la justa frente a su similar sudamericano.

Sin embargo, dos décadas después, los del Pedregal volvieron a la capital española. En 2004, escribieron un capítulo imprescindible en su historia. Bajo la dirección de Hugo Sánchez, el pentapichichi y eterna figura de los blancos, le pasaron por encima al Real Madrid por la mínima. Un derechazo, a los tres dedos, de Israel Castro sobre el minuto 70 sentenció la victoria sobre Los Galácticos.

“Cuando llegamos allá, una semana antes, fuimos a verlos a un partido de la Champions League. Nos veíamos y pensábamos ‘¿Vamos a jugar contra estos? No puede ser’. La gente no daba un peso por nosotros. (...) No creíamos que habíamos ganado. Ver a los de La Rebel que hicieron un esfuerzo por estar allá. Fue algo bien bonito porque terminamos algo que veníamos trabajando”, aseguró José Luis “El Parejita” López.

Venían de conquistar el Torneo Clausura de la Primera División Mexicana. Sólo que tras pasarle por encima a jugadores de la talla de Zinedine Zidane, David Beckham, Luis Figo, Guti y Michael Owen, parecía que el cielo era su límite. Entonces regresaron al territorio azteca con impulso para hacerse del certamen de Apertura. Consiguieron el tan recordado bicampeonato liguero. Vaya año envidiable.

Alzar el Joan Gamper era uno de sus objetivos recientes, pero fallaron en el intento. Habrían sido el primer club del mundo en coronarse con ambos galardones. Qué lindo pudo ser. En 2022, y ya con la flamante incorporación de Dani Alves, Barcelona los liquidó por 6-0. Un doblete de Pedri, aunado a tantos de Robert Lewandowski, Ousmane Dembélé, Pierre Emerick Aubameyang y Frenkie de Jong, sepultó sus esperanzas.

Aún con el descalabro, Alves se despidió del Camp Nou como no lo pudo efectuar a su salida de la institución blaugrana. El futbolista con más títulos en el futbol retornará a su nueva realidad en la Liga MX. Los dirigidos por el estratega argentino Andrés Lillini buscarán remontar posiciones en el vigente Torneo Apertura. Son favoritos y desean reivindicar el camino.



Bookmark and Share

18 de agosto de 2022

Héctor Toledo y la reconstrucción del Multifamiliar Tlalpan



Por Fabio Antonio González Rojas, Andrea Alejandra Escobar Garduño y Alejandro Carmona León 
Cuando el edificio 1-C –una construcción perpendicular en la que vivían por lo menos cuarenta familias– colapsó sobre su propia estructura, Héctor Toledo se encontraba trabajando, aún inconsciente de los estragos ocurridos en su propio lugar de residencia, pero condicionado por sus experiencias pasadas y predispuesto a formar parte de un extenso proceso que involucraría la remodelación de la unidad habitacional entera.

El multifamiliar Tlalpan fue uno de los puntos más reconocidos en la Ciudad de México por sus daños después del sismo del 19 de septiembre de 2017, sufriendo daños estructurales que imposibilitaron su ocupación. Residente del multifamiliar desde hace 13 años, Héctor sirvió como una pieza vital dentro del proceso de recuperación en el multifamiliar Tlalpan, abarcando diversas tareas que incluyeron trabajar como administrador de su edificio y utilizar sus conocimientos como ingeniero civil para fortificar (y en algunos casos, reconstruir por completo) los diez edificios que conforman a la unidad, la cual contaba con una población estimada de entre 2000 y 2500 residentes antes del sismo. 

“Había fallas estructurales en varios edificios, y sabiendo que no podríamos dormir ahí, nos dedicamos a sacar lo básico. A los pocos días empezamos a juntarnos con otros vecinos para decidir qué íbamos a hacer”. El resultado de dicha organización resultó en la asamblea de vecinos, respuesta esencial ante el infructuoso apoyo ofrecido por las autoridades de la Ciudad de México, quienes carecían del material necesario (de acuerdo con Héctor, ni siquiera tenían pluma o papel para anotar los nombres de los fallecidos) y contaban con una organización deficiente, en gran parte debido a la magnitud del evento a nivel nacional. 

Héctor reconoce un total de 9 fallecidos durante la primera semana de rescates en el multifamiliar, además de 18 individuos rescatados con vida, primordialmente por los propios vecinos. La manifestación de organizaciones externas fue paulatina, y en los siguientes días incluyó unidades del ejército, la marina, e incluso voluntarios boy-scout – pero los vecinos insistieron en dedicarse a la seguridad de su propio hogar, buscando mantener el control de aquello que les pertenecía. 

La organización de los vecinos se dedicó entonces a construir campamentos para los residentes, mismos que funcionaron como punto de encuentro para las numerosas asambleas efectuadas durante el transcurso de varios años. Inicialmente eran agrupaciones diarias, disipándose lentamente con el paso del tiempo. En los dos años siguientes, sólamente tres edificios fueron re-habitados, mientras que el resto permaneció en reparaciones hasta marzo de 2020. 

Uno de los problemas que detuvo la reconstrucción de la unidad fue la lucha por el uso de recursos públicos para el proyecto, lo que Héctor relaciona con los cambios de administración ocurridos en 2018. Inicialmente, el gobierno de Miguel Mancera buscaba llegar a un acuerdo a través de préstamos en forma de crédito  – evento imposible para los vecinos, no solo por falta de dinero, sino también por el simple hecho de que un gran porcentaje de ellos había perdido su trabajo, su hogar y sus seres queridos. 

Dicha problemática detuvo el proceso de reconstrucción por lo menos un año, de acuerdo con Héctor, quien también lamenta la muerte de numerosos vecinos que perdieron la vida durante el arduo proceso – ya fuese por heridas relacionadas al sismo, cánceres producidos con el paso del tiempo, o los efectos directos de la pandemia de COVID-19.

El abandono de la unidad durante los primeros meses dio pie a un estado de putrefacción previamente desconocido para sus residentes: Comida atrapada en refrigeradores, ennegrecida y descompuesta, saqueos de bienes dentro de los edificios y rupturas estructurales imposibles de temer durante las noches en campamento.  Permanecían peligros estructurales, peligros de fugas de gas y peligros de infecciones. 

Héctor se considera afortunado por haber recibido un tiempo libre de su trabajo, además de haber sido alojado por su familia de forma inmediata y  eventualmente firmar un contrato de renta para una vivienda ubicada en la cercanía del multifamiliar, permaneciendo comprometido durante el proceso entero. Ante la pregunta del por qué (¿Por qué decidiste regresar?), contesta con sinceridad: “No había otra opción”. 

El departamento era propio y las condiciones monetarias no le permitieron permanecer fuera a largo plazo. Su tono permanece tranquilo y elocuente, informativo y completamente abierto a compartir información, tanto de las cifras como de las condiciones generales de sus vecinos. Estima que tan solo un 60-70% de los residentes que habitaban la unidad previamente al terremoto regresaron, mientras que otros buscaron nuevas residencias, partieron a “provincia”, o encontraron un nuevo hogar con su familia (sobre todo personas de la tercera edad, quienes esperan vivir los últimos días de su vida acompañados). 

Originalmente construida en 1957, la unidad habitacional recibió una remodelación extensa, que, de acuerdo con Héctor, aumentó el valor de los departamentos, y con más importancia, otorgó una seguridad completa ante futuros sismos. “Ya han habido dos fuertes sismos de más de 7 grados, y la estructura ha permanecido estable… antes no habían columnas, por ejemplo, y ahora hay columnas que sostienen al edificio por completo”. Toledo se expresa con cierto aire de orgullo, actitud razonable considerando el papel participativo que tomó durante el proceso. De cualquier manera, asegura que existen vecinos que no se encuentran convencidos, algo que tanto el cómo la lógica conectan a los traumas experimentados por el sismo.

“Existen vecinos que ante cualquier leve movimiento corren inmediatamente, sobre todo los que estuvieron en el multifamiliar durante el sismo. Muchos ni siquiera pudieron llegar a la puerta de su departamento porque el movimiento los dejó tumbados en el piso”. El entrevistado asegura también que, con el paso del tiempo, dichas condiciones cambiarán: “Los que corren eventualmente se calmarán, y los nuevos (que antes no temían), eventualmente correrán. Así pasa.” Resulta interesante encontrar una naturaleza cíclica entre los habitantes de la Ciudad de México y los terremotos, algo que Héctor también identifica al narrar su experiencia durante el sismo de 1985. 

“Tenía siete años, y de mi primaria, éramos 60 alumnos, y sólo regresamos 7… Algunos murieron, otros se fueron.” – Héctor reflexiona con cierta tristeza, mientras recuerda su pasado dentro del Multifamiliar Juárez en la colonia Roma, su hogar en la infancia y un inmueble que resultó fuertemente afectado por el sismo del ‘85. 

Toledo asegura que sus experiencias de 1985 le enseñaron la posibilidad de organizarse y reconstruir como comunidad, la que utilizó como base en 2017 a pesar (o quizás, con mayor ayuda de) de los cambios tecnológicos que habían surgido entre ambos eventos. 

La conversación concluye con la mención de una futura asamblea por realizarse, la que Héctor considera una formalidad. Para él, el proceso ha terminado. Se considera seguro en su nueva vivienda, pero se mantiene abierto a las interacciones con la comunidad. Toledo se muestra completamente abierto a futuras entrevistas, buscando mantener una memoria viva. Está claro que su compromiso con el multifamiliar está lejos de haber concluido - de la misma manera en la que las placas tectónicas se encuentran en constante movimiento, ocasionalmente provocando un evento inesperado (pero en realidad, esperado) para los habitantes del valle de México. 

Imagen: Wikimedia 





 Bookmark and Share

Concierto Transfrontera: un cántico al aniversario 70-15 de Ciudad Universitaria

  • Un concierto que muestra la calidad de las diversas propuestas en la escena musical mexicana.

Por Emiliano Alfonso Salazar
El Concierto Transfrontera conmemorará los 70 años de fundación de Ciudad Universitaria y 15 años ser declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco. Será el 10 de septiembre en Las Islas del campus central de la Universidad Nacional Autónoma de México, y busca desdibujar las fronteras existentes en la música, con una mezcla entre el jazz, rock, la música tradicional y la experimental.

La presentación iniciará a las 12:00 horas y concluirá a las 4.30 pm, con un circuito de 6 propuestas sonoras diferentes, mismas que aluden a la diversa cantidad de música que existe en el país.

Integran las propuestas la bajista Carina López, la presentación en conjunto de Leika Mochán y Gustavo Nandayapa, Gabriel “Queso” Bronfman, la banda Klezmerzon, el arpista Celso Duarte y el acordeonista Jair Alcalá; quienes combinarán la fusión de géneros, para crear un concierto inclusivo, en el que la improvisación, la innovación, y el talento serán elementos presentes a lo largo del evento.

El concierto es producto del proyecto Transfrontera (iniciativa de Música UNAM que surgió durante el confinamiento a causa del COVID-19) y es organizado por Cultura UNAM y la Dirección General de Música de la UNAM en colaboración con la Secretaría de Cultura del Gobierno de la Ciudad de México. Claudia Curiel, secretaria de esta última dependencia, mencionó que este concierto es un regreso a las aulas a través de la música a la par de ser una bienvenida a los alumnos por parte de la Universidad.

Con estos eventos Cultura UNAM busca fomentar la cultura, por lo que la entrada será libre. Las autoridades hicieron una invitación general para no perderse este “sugestivo” concierto celebrado en uno de los sitios más emblemáticos del campus universitario. Al respecto, Celso Duarte mencionó la emoción que alberga al ser la primera vez que tocará en dicho lugar y se sumó a la cordial invitación de no perderse esta ceremonia.

Finalmente, este concierto es parte del programa 70-15 Rehabitar CU: Patrimonio vivo y dinámico, que busca destacar la belleza e importancia de CU y convocar a la convivencia de la comunidad universitaria; indicó Rosa Beltrán, quien expresó que no hay mejor manera de llevar a cabo esta celebración si no es por medio de la música, dado su carácter universal.

De izq. a der.: Celso Duarte, Carina López, Claudia Curiel, Rosa Beltrán, Benjamin Shwartz y José Wolffer.




 Bookmark and Share