23 de julio de 2011

PATEANDO LUNAS: DEFICIENTE APOYO AL FUTBOL FEMENIL MEXICANO


Por Tracy Miguel Sampedro
México (Aunam) A lo largo de la historia, la figura de la mujer en el deporte se ha visto enmarcada en un contexto donde los controles sociales, económicos y simbólicos tienden a obstaculizar su participación. No obstante, la historia del deporte femenil está llena de incontables esfuerzos y voluntades de cientos de mujeres para abrirse paso dentro del mundo deportivo.

Hoy, a más de cien años de la primera participación femenina en los juegos olímpicos de 1990 celebrados en París, restringida a diecinueve deportistas repartidas en las disciplinas del tenis y golf, de acuerdo con un artículo publicado en la revista Open el primero de noviembre del 2007, difícilmente alguien podría decir que la presencia de la mujer en el deporte está limitada; al menos, no en apariencia.

Así, siendo el deporte un aspecto de la vida cotidiana, ya sea como actividad física, atlética, recreativa o expresiva; es de preocuparse si por cuestiones de género se excluye de ser partícipe a gran parte de la población.

Orígenes del Futbol femenil en México. De la casa a la cancha

De acuerdo con Claudia Ivette Pedraza de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) en su tesis de maestría, si en sus inicios el desarrollo del deporte de forma estructurada fue poco visible, es necesario acotar que el deporte moderno surgió, se organizó, se desarrollo y se difundió como práctica exclusivamente masculina. No obstante, esta situación comenzó a modificarse desde finales del siglo XIX y durante todo el siglo XX, a partir de la incorporación de la sociedad femenil al ámbito laboral, originado por la Primera Guerra Mundial.

Desde que llegó el balompié a México se presentó una división entre las mujeres. Algunas sintieron indiferencia e incluso odio por el balón al ser una representación de lo violento; otras se convirtieron en espectadoras y llegaron a practicarlo, como afirma Maritza Carreño, de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, en su tesis de maestría.

Desde la llegada del futbol a principios del siglo XX, en México se presentó dicha división. Ahora bien, si al principio fueron los padres, los hermanos, los novios, los tíos, los vecinos, etc., quienes practicaron este deporte ¿quiénes serían sino los mismos hombres quienes motivaron a la mujer a patear balones?

Si bien, puede creerse que el futbol llegó para separar a hombres y mujeres a causa de que las ellas se sentían desplazadas por el balón, es impensable creer que nunca estuvieron ligadas al soccer; ya sea como “adorno” en las fotografías para celebrar un triunfo, como acompañante o como espectadora (por las buenas o por las malas). No obstante, no se puede definir el momento en que la mujer comenzó a tomar partido dentro de los espacios futbolísticos, puesto que el proceso fue lento y se dio en distintos puntos de la República.

No obstante, se encuentran documentados todos y cada uno de los esfuerzos que aquellas mujeres hicieron no para convertirse en gladiadoras, porque gladiadoras ya eran, sino para ser reconocidas y apoyadas.

Destierro campal

Por otro lado, quién puede asegurar que el gusto por las “cascaritas” surgió en las mujeres de un momento a otro, casi como si se tratara de generación espontánea. Si se piensa detenidamente lo más probable es que dicho gusto fue una suerte de amor a primera vista; aunque claro, debido al contexto social de aquél entonces posiblemente hubo pocos casos de enamoramiento y las mismas damiselas reprimían sus corazones.

Un pasto bien podado, dos porterías, un radiante sol y un balón con 360° de circunferencia era lo que necesitaban los hombres para sentirse superhéroes por el lapso de dos horas aproximadamente; entonces, por qué no creer que el temor de la posibilidad de perder esa gloriosa imagen fue el detonante para limitar a las mujeres a las gradas. Esa bien podría ser una teoría que ayude a vislumbrar los motivos que desterraron en un primer momento a la mujer, y que ahora limitan
sus movimientos.

O quizás tenga que ver con otras cuestiones, como afirma el Director Técnico del Club de Futbol Femenil Andrea´s Soccer México, Armando Magaña:

El principal problema que enfrenta el futbol femenil es que la familia mexicana no permite que las mujeres hagan deporte, ya no hablando de futbol solamente, sino de cualquier deporte; la mujer mexicana no tiene derecho más que a estar como las escopetas en la época de la revolución… en un rincón y bien cargadas.

Las mujeres deben ser súper protegidas, aunque después se las lleve un cabrón que ni siquiera conocen… Sí, hay un machismo, pero depende de las mujeres, el machismo se da porque ellas mismas lo promueven, ellas son las que echan a perder todo teniendo a sus hijas en su casa trabajando como mucamas y cuidando de sus hermanos.

¡Fue gracias a la segunda guerra mundial cuando se dieron cuenta que la mujer puede servir para trabajar en múltiples cosas! Ahora ya se habla de que el 56% de la población del mundo son mujeres, ¡como si hubiera sido al revés…!

El alguna vez jugador del Club Necaxa y entrenador de innumerables equipos juveniles y universitarios en la rama varonil, también comentó que la familia mexicana no entiende que debe formar integralmente a sus hijos con ayuda del Estado; y que la manera ideal es conforme a los tres estadios propuestos por un influyente psicólogo educativo estadounidense del s. XX que realizó considerables contribuciones a la Taxonomía de objetivos de la educación, Benjamin Bloom: afectivo, psicomotor y cognoscitivo.

Él considera que el apoyo del que carece el futbol femenil es el apoyo por parte de la familia.

Así, el futbol femenil es víctima de ese sistema, entonces ¿cómo se puede sobrevivir con una quinceava parte de lo que puede obtener un beneficiario del futbol varonil?

Aunque bueno, también hay que decir que el apoyo es para las élites, no para la raza. Cuando alguien de la raza destaca sobre los demás es cuando se le apoya.

¿Patrocinadores?

Para el año de 1998 el futbol femenil ya contaba en nuestro país con una Federación Mexicana de Futbol Femenil (FMFF) que aglutinaba alrededor de 800 mujeres de entre 14 y 27 años de edad, repartidas en 60 ligas, auspiciadas por 22 asociaciones de aficionados ubicadas en 19 entidades de la República Mexicana, con centros de capacitación en el Distrito Federal (UNAM e IPN), Nuevo León, Jalisco y Cancún, según datos de una crónica publicada por Isabel Barranco Laguna en el periódico La Jornada el cinco de octubre de 1998.

Ahora, lo más importante es saber ¿de dónde sale todo el talento de la Selección Mexicana de Futbol Femenil? ¿Quiénes apoyan e impulsan el futbol femenil? La respuesta… “todo el apoyo proviene de los padres de familia”; en eso coinciden tres representantes del futbol femenil: Jorge Corral, Armando Magaña y Mercedes Rodríguez.

Jorge Corral, personaje dentro del futbol mexicano y actualmente auxiliar técnico del Club Andrea´s Soccer, expresa su opinión respecto al apoyo que recibe por parte de los familiares de sus jugadoras:

“Nosotros tenemos una cancha preciosa, es un lujo el cual nosotros tenemos que pagar. La renta de la cancha es de $13,600 mensualmente; y aunque tú ves muchas niñas, muchas no tienen el nivel económico para pagar por lo que se beca a gente y apenas salen los gastos.

De acuerdo a esto, en el futbol femenil los uniformes, los viajes y los arbitrajes son pagados por los entrenadores y los padres de familia. En todo el país, aquellos que se dediquen al futbol femenil no tienen apoyo, y se debe principalmente a que los patrocinadores aún no confían en su trabajo.

Las personas piensan que todavía estamos en pañales, que todavía no hay calidad.

En la Selección Nacional también es muy poco el apoyo… quizás tienen una beca, cuando comúnmente un jugador profesional que está en una selección mayor tiene viáticos, tiene sueldo de su equipo, y puede dedicarse a esto al 100%.

En cambio, una mujer tiene que estudiar, o tiene que trabajar, y la beca que le da la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (CONADE) es muy poco.”


A lo anterior, el Director técnico, Armando Magaña, agregó:

“Mis jugadoras si tienen apoyos, en los 15 años que tengo aquí, hemos tenido a 25 jugadoras de selección Nacional; y muchas tienen becas del Estado de México. Ellas como jugadoras han destacado en ese nivel, pero yo como Andrea´s Soccer no lo he logrado.

El señor Magaña considera que para tener derecho a participar en un evento tene que ganárselo. Así, a partir del 2003 han participado cada año en las eliminatorias del Estado de México, para representarlo, en las Olimpiadas Nacionales Juveniles o en el Campeonato Nacional de Categoría Libre; promovidos por la Federación Mexicana de Futbol, la Comisión Nacional del Deporte y el Instituto Mexiquense de Cultura Física y Deporte (IMCUFIDE).

Y cuando Andrea´s Soccer es el representante del Estado a las jugadoras les dan sus uniformes exteriores, sus uniformes interiores, les pagan su trasporte y les ofrecen el hospedaje cuando es necesario los días que estén en la competencia correspondiente.
Pero sólo hay eso a nivel oficial, es decir, son los únicos eventos convocados, promovidos y organizados por el Estado. En las otras competencias no obtienen más que el reconocimiento y práctica, pero es donde permanentemente están participando durante el año: la Liga Mexicana de Futbol Femenil y la Liga Nacional de Futbol Femenil. Y en ambos lados todo el apoyo proviene de los padres de familia.

Una cuestión similar se puede observar en el Club Laguna, asociación que cuenta con cancha pero en donde la situación no es más favorable en comparación con Andrea´s Soccer. Al respecto la Directora General Mercedes Rodríguez, comentó que el futbol femenil existe porque a las mujeres les gusta jugar, nada más, pero no porque haya muchos apoyos. Actualmente hay apoyo pero sólo para la selección femenil y eso no al 100% como se lo dan a la selección varonil.

No hay apoyo porque no somos un artículo que se pueda vender o que la gente se quiera comprar, como los partidos de primera división. La gente va a los partidos porque lo promueven en la televisión.

La entrenadora considera que afortunadamente el futbol femenil ha ganado espacio, ¿dónde?, en la Selección Nacional, pero que antes no era así…

Recuerdo que a nosotras nos dieron como 12 o 13 dólares cuando fuimos al Primer Premundial en Haití.

De hecho… se hizo la Selección Femenil porque la FIFA hizo una derrama hacia las federaciones de cada país para que incursaran el futbol femenil, entonces tenían la obligación de presentar una Selección Femenil, y el que no la presentara sería multado. Lo que pasó fue que nos entrenaron dos meses y nos enviaron para Haití.

En ese lugar hacía mucho calor, y nos mandaron con un pans de felpa, un short de gabardina, una buena playera y unos tenis para jugar del número seis… no nos quedaban, me los llevé pero no jugué con ellos. El short lo tuvimos que cortar para poder correr.

Estados Unidos llevaba más gente de cuerpo técnico que nosotros de jugadoras. Con decirte que ellas comían lo que le preparaba su cocinero y a nosotras nos daban pollo y frijoles con arroz todos los días. Ellos ganaron ese año.

Cómo ha sido el apoyo a las jugadoras y a los equipos

Si bien el apoyo inicio con la creación de la creación de la Selección Femenil promovido por la FIFA, un segundo momento que cambió la ruta del Futbol femenil en México, fue la creación de los juegos anuales conocidos como Olimpiada Nacional.

Los organismos detrás de este proyecto fueron la SEP, la CONADE, un poco la Federación Mexicana de Futbol (FMF), el Sector Aficionado, y los Institutos del Deporte de cada Estado.

Estos juegos comenzaron en 1996, pero el futbol femenil comenzó a contar hasta el siguiente año. Poco a poco este torneo tomó fuerza y actualmente constituye un factor importante para la renovación de elementos en las filas del futbol femenil, puesto que su fin principal es enfocarse en las jugadoras de entre 12 y 15 años de edad.

Así, como afirmó el entrenador de la Selección Méxicana, Leonardo Cuellár, en una entrevista realizada por el periódico La Jornada, el pasado ocho de mayo: “despacio pero fuerte, el futbol femenino está cada vez más posicionado en México, a pesar de que no hay una liga en forma, es de reconocerse que las chicas que vienen trabajando desde abajo lo están haciendo excelente, las tres selecciones avanzaron a su Mundial”

Y el problema se encuentra en que “No hay continuidad en equipos locales, no hay ligas en colonias, municipios y delegaciones, es complicado, pero la Olimpiada Nacional ha constituido un gran semillero”.

Cómo ha pujado el futbol femenil para recibir el apoyo

Es innegable que la mujer siempre ha buscado el reconocimiento con base en hechos, se esfuerza día a día para que se le dé su lugar dentro de la vida social, ya sea como ama de casa, empresaria, médica, educadora, astronauta, y cómo no… ¡como futbolera!

Durante las últimas décadas, el deporte femenil ha evolucionado de manera considerable: desde el aumento de mujeres incorporadas a la práctica deportiva hasta la creación de ligas y competencias de nivel profesional de la rama femenil, la conquista de espacios es innegable; aunque en ocasiones (en muchas ocasiones) poco evidente.

Un primer acercamiento al área deportiva se dio durante los años 70 y 80 logrando un importante avance en los intentos de otorgar igualdad de oportunidades. Con la Convención sobre la eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la mujer (CEDAW), aprobada por la ONU en 1979, y la Carta Intencional de la Educación Física y el Deporte, aprobada por la UNESCO en 1980, se consiguió la garantía jurídica del derecho de las mujeres al deporte.

A partir de ese momento se reagendó el tema de las mujeres en el deporte como uno de los principales asuntos a tratar en las mesas de discusión. Se realizaron conferencias y congresos en distintos países alrededor del mundo para debatir sobre la problemática del deporte femenil.

Hablando de la situación en México, sobra decir que se han realizado marchas en pro´ de la igualdad de géneros, decenas de ponencias donde se menciona este conflicto, entre otras manifestaciones de oposición a una de las distintas formas de discriminación entre hombres y mujeres. Pero más específicamente en el futbol las mujeres han buscado reformas legales para conformar asociaciones estatales.

La nota salió en el periódico La Jornada, el 4 de Octubre de 2008 y decía lo siguiente: “Primero, la Federación Mexicana de Futbol (FMF) les cerró las puertas; después, el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) inicio una investigación por presunto agravio, y ahora las integrantes de la Liga Premier Profesional de Futbol Femenil AC (LPPFF) reencausaron su lucha con una campaña para conseguir reformas legales que permitan la formación de asociaciones estatales de mujeres”.

El año anterior, el 9 de Marzo del 2007, las futbolistas protestaron frente a la Federación Mexicana de Futbol (FMF) para exigir su afiliación, el escándalo estuvo fuerte y el periódico La Jornada cubrió la nota:

“Según explicaron las futbolistas, que agrupan a los equipos de ocho estados, el 18 de marzo de 2006 presentaron ante el organismo rector del balompié nacional una solicitud de afiliación y desde entonces no han tenido respuesta”

“Tampoco han logrado ser recibidas por los titulares de la entidad, que entonces era Alberto de la Torre y desde hace seis meses es Justino Compeán.”

Hoy por hoy, las mujeres mexicanas han logrado consolidarse como iconos del deporte mexicano. Sus notables resultados han llevado a personajes como: Lorena Ochoa, Maribel Domínguez, Ana Gabriela Guevara o Belem Guerrero, a convertirse en fuente de inspiración para muchas niñas que desean incursional dentro del deporte femenil en el país.

Terreno de juego


El sol raya en lo más alto del cielo, el pasto está fresco y bien podado, el viento se siente en las mejillas; todo está listo, y las gladiadoras entran al campo.

Algunas con el cabello suelto, el resto con el cabello recogido, ya sea con coleta, chongo o una trenza. Vistiendo un short, una playera y unos buenos tacos se disponen a ejercitarse.

Según la temporada y el próximo partido, cada entrenador establece el tiempo y los ejercicios a realizarse en el calentamiento y el entrenamiento. Estiran los brazos por aquí, estiran las piernas por allá… y se reúnen al centro de la cancha.

Si fuera del campo de batalla el o la entrenadora son el amigo incondicional, el psicólogo, el masajista, y mil cosas más; dentro son sólo una cosa, entrenadores.
A cada momento se escuchan elogios y regaños:

“Tienes que pegarle firme, ¡con decisión!”,
“¡Pónganle seriedad, por favor!”,
“¡No viene, y cuando viene se duerme!”,
“Buena portera, ¡bien!”,
“Muévanse, no las quiero ver paradas”,
“¡Pásale el balón!”…

¿Existe diferencia entre hombres y mujeres? Si se asiste a un entrenamiento de futbol femenil y a uno varonil pareciese que no.

Que más se puede decir, las evidencias están ahí, en los raspones, en el sudor, en el esfuerzo, en los cabezazos y en las patadas de las pamboleras, de aquellas mujeres que ven al futbol como una pasión y desean que se les reconozca dentro del medio.

Esto es el futbol femenil, los pros y los contras a los que se enfrenta cada mujer que duerme con un balón al lado; que hace el esfuerzo diario por asistir a las prácticas y llenar el cochinito para pagar los uniformes, los tacos de color rosa y el balón con estrellitas.

Por eso y por muchas cosas más las mujeres han crecido y crecerán en esta sociedad, porque descubrieron que la única manera de ser reconocidas y apoyadas fue pateando lunas… lanzando sus sueños al aire para después correr, saltar, dar un cabezazo y gritar a todo pulmón…. ¡Gooooooooooooooooooool!






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INTERCAMBIO DE ESTUDIANTIL, INTERCAMBIO DE IDEAS

Por Laura Patricia Lanuza Cuatepotzo
México (Aunam). La Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS) es una de las que reciben un mayor número de alumnos extranjeros, aproximadamente 70 al semestre según la maestra Verónica Camero Medina, jefa del Departamento de Intercambio Académico de la institución, quienes intercalan materias con otras facultades como: Filosofía o Economía, pues sus programas son similares a los revisados en las otras universidades.

La Movilidad Estudiantil es la posibilidad que ofrece la UNAM de llevar a cabo intercambios internacionales o nacionales durante un periodo de tiempo, con el fin de que los alumnos aprovechen los vínculos que se tienen para mejorar no solamente en el ámbito profesional y académico sino también en lo personal. Esto mediante una mejor comprensión de expresiones culturales y sociales que conforman al mundo entero.

Según Camero Medina, la Movilidad Estudiantil es la oportunidad que se les brinda a los alumnos de alto rendimiento académico de ir a cursar algunas materias a universidades nacionales y extranjeras. En la Facultad ya mencionada hay dos tipos de movilidad: la nacional e internacional.

Movilidad Estudiantil Nacional

Todo tiene una organización, y la Movilidad Estudiantil Nacional no es la excepción, el Espacio Común de Educación Superior (ECOES) es la institución encargada de agrupar a las universidades e instituciones de educación superior públicas de México adscritas al programa de intercambio y establecer los parámetros a seguir en el convenio, ésta institución es dependiente de la UNAM.

Camero dice que son pocas son las universidades que tienen el honor de entrar al convenio, puesto que sólo son aceptadas aquellas que demuestren: ser instituciones destacadas y notables, poseer un patrimonio histórico-cultural y tener un buen nivel académico.

Según la página oficial de Espacio Común de Educación Superior (ECOES) éste fue creado con distintos fines entre ellos: entablar relaciones cordiales y de cooperación entre las universidades participantes, crear responsabilidades compartidas, establecer acuerdos que permitan compartir la utilización de la infraestructura científico-tecnológica; facilitar la movilidad de estudiantes por medio de programas de intercambio y promover la colaboración de las Instituciones Integrantes en distintas actividades.

“De aquí de la Facultad de Ciencias Políticas, casi nadie pide intercambio al interior de la República, porque ya están en la mejor universidad del país, más bien los de provincia quieren venir”, comentó la jefa del Departamento de Intercambio Académico al referirse a la baja demanda de intercambio nacional desde la FCPyS.

Por desgracia no se puede dar la oportunidad a todos los alumnos de la Facultad de irse de intercambio a otro lugar, por tal motivo, los requerimientos son estrictos: ser alumno regular y de tiempo completo, tener un promedio mínimo de 8.5, llevar a cabo todos los trámites, cubrir por lo menos el 60% de los créditos y contar con un seguro médico.

El ECOES proporciona sólo tipo de beca de manutención equivalente a $5,000 (cinco mil pesos) mensuales, los cuales son depositados en una cuenta bancaria, En cuanto a las Instituciones de Educación Superior (IES) normalmente exentan a los alumnos becados del pago de colegiatura. Lo único que corre a cargo de los estudiantes es cubrir el costo del transporte.

El ECOES está compuesto por 39 instituciones de educación superior, dispersas por todos los estados de la República Mexicana. Entre las más importantes destacan, la Universidad Autónoma de Baja California sur, la Universidad de Sonora, Universidad Autónoma de Chihuahua, Universidad Autónoma de Sinaloa, Universidad de Guanajuato, Universidad Veracruzana, Universidad Autónoma de Puebla, Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas, el Instituto Politécnico Nacional, La Universidad Autónoma de México, entre otras.

Movilidad Estudiantil Internacional

La Movilidad Estudiantil Internacional es la facilidad otorgada a los alumnos de viajar a otro país a estudiar por un semestre o dos máximo. La Dirección General de Cooperación e Internacionalización (DGCI) a través de una pequeña ramificación llamada Oficina de Fomento a la Internacionalización (OFI) se encarga de realizar los intercambios internacionales a alguna de las distintas Universidades con las que se tiene convenio.

La oferta está abierta para cualquier estudiante que cumpla con el perfil requerido y además debe estar dispuesto a llevar a cabo actividades escolares lo mejor posible y de tiempo completo.

Es difícil pero no imposible obtener una beca

“Obtener una beca no es cuestión sencilla pues éstas únicamente son para alumnos de alto rendimiento académico”, señaló Verónica Camero, quien comentó que entre los requisitos elementales esta: tener cubiertos como mínimo los créditos de cuarto semestre, no adeudar materias y jamás haber reprobado una, promedio mínimo de 9 y haber acreditado el examen TOEFL, IELTS y/o de otro idioma según lo establezca la institución destino.

Cabe señalar que no sólo se llevan a cabo intercambios a nivel licenciatura sino también en posgrado, en la maestría o doctorado. El doctor en Ciencias Políticas Ricardo Román Gómez Vilchis también profesor de la FCPyS destaca que los requisitos son mucho más estrictos para un posgrado pues además de lo mencionado se requieren, tres cartas de recomendación, una de propósitos y un examen.

Según el Secretario de Asuntos Estudiantiles de la FCPyS, Humberto Pineda, al problema principal que se enfrentan los aspirantes es el idioma, pues cada institución pide un nivel diferente de dominio de éste, algunos aceptan el examen del Centro de Enseñanza de Lenguas Extranjeras (CELE) y otros más exigentes piden el TOEFL que se hace en las embajadas.

A diferencia de los académicos el profesor Gómez Vilchis mencionó que en experiencia propia, el problema más grande al que se enfrentó fue el cambio radical de cultura, pues no le fue fácil acostumbrarse a un nuevo sistema.

“En todas las facultades se piden cosas distintas, es por eso que en la página de internet se requiere una cosa y en las escuelas otra” afirmó Camero Medina, como justificación a esto, dijo que la demanda variaba de acuerdo con la facultad o universidad, por lo cual a veces se tiene que ser más riguroso en lo que se solicita.

Existen dos formas de ir a un intercambio internacional, mencionó la maestra Camero Medina: la primera forma es sólo con un apoyo por parte de las los instituciones de educación superior sin soporte económico y, otra más, es con una beca de manutención (la cual se empezó implementar apenas hace un año) y dura aproximadamente los 4 meses que el estudiante está en el extranjero.

La beca de manutención como ya mencioné tiene poco de haber sido creada, y según la maestra Camero ha tenido gran éxito, pues ahora gracias a ella hay más posibilidades de que alumnos con menores recursos puedan ir a estudiar a otro país y conocer un nuevo sistema educativo.

El monto que se otorga al becario de la nueva modalidad de Movilidad Estudiantil dependerá del país al que vaya, para eso primero hacen un estudio socio-económico de la nación y con base en ello aprueban un presupuesto que se entrega en su totalidad al inicio del semestre.

Existe también otra institución dependiente del gobierno, el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), que brinda una beca por tres años a quienes deseen realizar un posgrado en otro país. Este programa fue el que aprovechó el profesor Ricardo Gómez para irse a la Universidad de San Diego California a realizar su doctorado.

El convenio que tiene la UNAM con universidades extranjeras se extiende casi por todos los continentes y en varios países, todas las instituciones de educación superior tienen un excelente nivel académico por tal motivo se garantiza que quienes tengan la fortuna de ir de intercambio recibirán una excelente formación.

En cuanto al aprovechamiento que se le da en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales a estas facilidades, la jefa de Intercambio Académico añadió que ha mejorado desde la introducción de la nueva beca, señaló que gracias a ella ahora aunque todavía son pocos los lugares que se pueden ofrecer son más que antes de, hace año y medio sólo se otorgaban 7 plazas y ahora se dan 30 es decir aumentaron a más del cuádruple.

Hace falta divulgación de la Movilidad Estudiantil


Para la justificar la falta de difusión que se le ha dado a la Movilidad Estudiantil, Verónica Camero dice que preferían sólo sacar una convocatoria en la Gaceta de la FCPyS dada la carencia de lugares, sin embargo gracias a la nueva beca se ha hecho mayor labor de propagación para que sean aprovechadas debidamente.

“la difusión es responsabilidad de toda la UNAM, no sólo de los alumnos” declaró Vilchis al hablar de la falta de propagación de los intercambios internacionales, pues afirma que la institución debería mostrarse más interesada en motivar e informar a los estudiantes acerca del tema.

Un sondeo de opinión realizado a 60 estudiantes de las cuatro carreras de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales acerca de los programas y becas de Movilidad Estudiantil Internacional, arrojó que tan sólo el 10%, conoce bien el tema, mientras que el otro 90% sólo sabe algunas acosas que han escuchado, argumentan su desconocimiento diciendo que no hay una buena difusión por parte de los encargados de la actividad.

A todos los sondeados les interesaría ser parte activa de la Movilidad Estudiantil e ir a otros lugares del mundo a experimentar cosas nuevas, sin embargo el 75% de ellos ven muy lejana la posibilidad de poder llevar a cabo ese anhelo y por tal no les interesa informarse a fondo acerca del tema.

Los estudiantes coincidieron en que los intercambios internacionales son una experiencia académica humanamente enriquecedora para cualquier compañero que tenga la oportunidad de ir. Lo que más les atrae es la convivencia con las personas del país receptor y conocer el lugar y cultura a fondo.

Países más solicitados para intercambio

Según la página de la DGCI algunas de las universidades más destacadas y requeridas son: en Canadá la Universidad de Montreal, en E.U.A. la Universidad de Arizona, en Colombia la Universidad de los Andes, en Chile Universidad de Artes, Ciencias y Comunicaciones, en Francia Université Lille, en España Universidad de Valencia y Universidad de Barcelona, en Alemania Freie Universitât Berlin, en Italia Unoversitá degli Studi di Siena, entre muchas otras.

El secretario de Asuntos Estudiantiles, Juan Pedro Antonio Chávez y la jefa del Departamento de Intercambio Académico coinciden en que lo mejor de la movilidad es el beneficio de convivir con gente de diferentes costumbres y creencias así como el conocimiento de otra nación, además se da un crecimiento tanto académico como humano, señalan los funcionarios.

“es una experiencia que permite crecer, madurar y encontrarse a uno mismo” así describió el doctor en Ciencias Políticas su vivencia, y en cuanto a la parte académica dijo que había encontrado mayor sistematización y organización en las actividades, lo cual le ayudó a manejar mejor sus actividades cuando regresó a México.

Por otra parte el doctor Gómez Vilchis piensa que la UNAM no es en totalidad una institución internacionalizada, pues mencionó que en realidad no hay una convivencia profunda con los alumnos extranjeros y nacionales. Él propone que se realicen actividades que propicien una mejor comunicación entre los estudiantes y con ello fortalecer también el sentimiento de identidad de los internacionales.

Gran experiencia, pero sólo para unos pocos

Humberto Pineda a modo de comentario dijo ver una maduración importante en sus alumnos que han ido a otros países a tomar clases, incluso muchos vuelven con objetivos fijos y una mayor motivación y formación con lo cual los profesores Pedro A. Chávez y Ricardo Gómez Vilchis concordaron.

“Todos los estudiantes que enviamos son alumnos de alto rendimiento, por tal no tenemos muchos problemas de reprobación en las Universidades Extranjeras” dijo Camero Medina, en caso de que reprobación la UNAM lo asienta en un acta de sus historiales y por obvias razones se atrasa con las materias que debe llevar.

Para Antonio Chávez el intercambio académico es parte de un flujo de personas, el cual considera necesario para crecer profesionalmente, argumenta que en un intercambio se puede dar un contraste de educación, ideología y formas de vida, además se incorpora una experiencia nueva de socialización.

Mencionó también no estar de acuerdo con la forma en que se eligen a las personas que viajan a otros países. “no siempre los mejores promedios son los mejores estudiantes” afirmó, sustenta diciendo que en ocasiones el factor económico puedo influir en que un alumno tenga un buen promedio o no, cosa que también dijo Ricardo Gómez es decir para alguien con buena economía es más fácil lograr una buena calificación.

En contraste el doctor Gómez Vilchis cree que sí es muy importante una buena calificación, pues denota perseverancia y dedicación, aunque coincide con el economista en que no demuestra la inteligencia de un alumno.

Para hacer una mejor selección de los becarios Antonio Chávez propone que se establezca un comité de evaluación, el cual se debe integrar por profesores que conozcan a los perfilados y puedan hablar de su desempeño para deliberar quien merece la beca.

“Es más recomendable hacer un intercambio durante la licenciatura que en un posgrado” dijo el doctor en Ciencias Políticas, argumentó que en la licenciatura se pueden desarrollar mejor las habilidades así como conseguir más fácilmente un campo de trabajo o interés, además resulta muy alentador lo cual lleva a los estudiantes a perseguir cada vez mejore metas.

Por último Antonio Chávez compartió un dato curioso, “se ha dado el fenómeno de que ahora los estudiantes de escuelas privadas como La Salle, piden sus intercambios académicos en la UNAM, anteponiéndolos, sobre escuelas internacionales”, con lo cual resaltó la importancia y el valor académico que se tiene en la UNAM y específicamente en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales.

Uno de los tantos pero tan pocos afortunados

Sentado en las oficinas de asuntos escolares de la Universidad de Santa Bárbara en California, Rafael Sánchez Cruz, esperaba la resolución del director para saber si sería aceptado en el programa de Movilidad Estudiantil Internacional, por fin la respuesta se le da y es positiva, ¡Rafael fue aceptado en la UNAM!

El último día en su país por varios meses, Rafael Sánchez Cruz aprovechó para hacer todo lo que quiso, “comí toda la comida que pensé iba a extrañar”, dijo echando su cabeza cubierta por espeso pelo castaño oscuro hacia atrás, se agarró la rodilla y encorvó su escuálido cuerpo, luego se pasó los dedos por la nuca y sonrió con los ojos perdidos en el cielo recordando todo lo que comió ese día.

“El equipaje ya estaba listo desde un día antes”, afirmó y meneó la cabeza positivamente, de su pantalón azul bombacho de desgastada mezclilla sacó un pañuelo desechable, se secó el sudor pues el sol era agresivo e implacable, apenas se podía soportar en aquella jardinera de piedra cubierta por la sombra de árboles flacuchos, bebió un poco de agua y prosiguió con el relato.

El nerviosismo por el viaje, hacía a Rafael revisar una y otra vez que todo lo que necesitaba para su nueva experiencia estuviera en orden y no le faltara nada; ropa, zapatos, sus característicos lentes cuadrados, una grabadora, libros y, desde luego sus preciados papeles de identificación estaban listos, sólo era cuestión de tiempo.

La camisa a cuadros verde de Rafa empezaba a sufrir los estragos del calor excesivo, unas manchas acuosas aparecieron, pero su voz jamás se cansaba de hablar. “Me costó mucho que me diera la beca de la DGCI”, le pidieron su historial en inglés y español, su currículo, un ensayo de sus propósitos a cumplir, dos cartas de recomendación y buen promedio.

Al preguntarle por su experiencia en México, contesta inmediatamente “No cambiaria mi estancia en este país por nada”, dice haber encontrado su pasión, la investigación, y expresó su deseo por regresar al país “quiero volver para hacer una indagación acerca del español de México, yo creo que en unos dos años más”, tuerce la boca y sube la ceja derecha.

Algunas de las diferencias que Rafael encuentra entre la Universidad de Santa Bárbara en California y la UNAM en el DF, es la gran competencia que hay entre los compañeros, el análisis de los temas, y la calidez de la mayoría de las personas, que existe en México y en específico en la FCPyS.

“Me llevo a California un gran crecimiento académico y profesional, gracias a la UNAM” muestra una mueca de orgullo, y cruza la pierna izquierda, luego abre los ojos y se echa un dulce a la boca “me gusta el ambiente aquí, las amistades son de las únicas cosas que se parecen en ambos países” suelta una pequeña carcajada y se sube sus lentes cuadrados de armazón negro con el dedo índice.

El 10 de junio será el último día que Rafael esté en México, ahora gracias al intercambio dice sentirse más seguro de lo que quiere y lo que le apasiona. “Ahora me será difícil irme a California, extrañaré aquí” dijo en voz baja mirando hacia el horizonte y con una sonrisa miedosa que apenas si hacia una curva en su boca.

En menos de un mes se termina la beca para Rafael, ahora considera a México su segunda tierra y sin dudas pretende volver. “La experiencia me ayudó a conocer una forma distinta de cultura y enseñanza, me gustó ahora podré combinar lo que sabía con lo que aquí aprendí”, dice sonriente y guiña el ojo derecho en señal de complicidad. Entonces Rafa se levanta, se despide y se aleja dando pasos largos con aquellos zapatos como de payaso de color gris.

La invitación a conocer a fondo el tema de los intercambios internacionales y desde luego a postularse para ganar una beca está abierta para todos los compañeros, también para que lo tomen como un aliciente para ser estudiantes de excelencia y alcanzar metas como esta, con lo cual se verán beneficiados en todos los aspectos.


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